Los chalets están diseñados con un enfoque en la durabilidad y la eficiencia, empleando materiales de alta calidad que aseguran tanto el rendimiento como la estética a lo largo del tiempo. El uso de madera y PVC en los acabados, tanto interiores como exteriores, no solo contribuye a crear un ambiente cálido y acogedor, sino que también ofrece una serie de beneficios prácticos. La madera aporta calidez y autenticidad al chalet, sin perder la armonía estética.
Uno de los principales ventajas de esta combinación de materiales es el bajo costo de mantenimiento que ofrece. A diferencia de otros materiales que requieren reparaciones y cuidados constantes, la madera tratada con PVC son resistentes a las inclemencias del tiempo, lo que reduce significativamente la necesidad de intervenciones periódicas. Esto no solo genera ahorro económico a largo plazo, sino que también contribuye a la sostenibilidad.